Sigue lejos

 

Sigue lejos

 

 

Lo sé, lo sé. Claro que lo sé, como no iba a saberlo.

No se me olvida que hoy debía estar sobrevolando esa incertidumbre. Tendría que estar por delante de esa etapa. Con una cadencia constante y tranquila, debería de encontrarme avanzando en este día.

 

¿Pero de qué me vale tener en la cabeza esto? Me vale para ser consciente una vez más, de que la realidad es una carrera con el viento en contra. Es un continuo esfuerzo en el que empleas el cien por cien de tu energía, para que cuando estás llegando divisar que a lo lejos se encuentra el límite que concluye el primer larguísimo tramo, el viento sopla fuerte y te lanza una vez más hacia la línea de salida.

Se trata de una esfera que te mantiene siempre abajo por la fuerza de gravedad existente. No importa lo fuerte que empujes, lo que grites, que corras o que saltes, ella constantemente es más resistente que tú.

 

Pues que rabia, que injusto, que intenso y que extenso es todo. No me sirve de consuelo eso de que lo bueno nunca es sencillo. Ni aquello de que Zamora no se hizo en una hora. Oh, no, esto es cierto y lo comprendo. No obstante, pensando y hablando desde el corazón considero que han sido muchas las rocas sobre las que he tenido que trialear con mi moto para poder salir de la zona ilesa. Son infinitas las curvas que he tenido que tomar con mi moto de carretera para llegar a otro pueblo y ver que me deparaba allí. Es demasiado lo que hemos tenido que batallar para estar y para ser.

 

Soy consciente de que lo que escribo no va a calar en muchos de vuestros corazones. Pero siento que debo confesar lo que siento, ya que la normalidad se adquiere cuando se habla sobre los hechos.

 

Es esencial lo que los ojos no pueden ver y por el contrario nuestras palabras si son capaces de expresar.

 

Somos increíblemente diminutos en un mundo tan inmenso. Solo reclamo a la suerte que me haga un guiño, que en este instante me llenaría el pecho de aire para seguir respirando con la relativa calma de la que puedo disponer.

 

#siemprefuertes

 

Escrito el 23/03/2020.